La ruta, señalizada cada 1000 m y en casi todos los cruces, comienza en El puerto pesquero de Bustio (A 0,5 km de Unquera). Nos vamos al Parque de la Remansona y cruzamos un paso interior de la N-634. Ascendemos por la pista de la izquierda hasta enlazar con un camino real que lleva a Pimiango. Seguimos la pista aglomerada a la derecha y empezamos una bajada eucaliptal por una senda que lleva a las Ruinas del Monasterio Tina y la Ermita de San Emeterio.
        Desde ahí cruzamos el reguero de Bartolo por una pasarela de madera y bordeamos el Monte de las Guirzas para llegar a la carretera del Faro, donde tenemos la Ermita de San Emeterio y al área recreativa de El Pindal, con bellas panorámicas de la Ensenada Moral. Aquí podemos conocer sus Cuevas Prehistóricas si llegamos a tiempo de coger un turno de visitas.
        Por la carretera de El Faro de San Emeterio llegaremos al Mirador del Picu de Pimiango.y nos dirigiremos hacia Pimiango, donde hay unas vistas excelentes si el día está despejado: a la izquierda, el valle prelitoral a los pies del Cuera; al fondo los Picos de Europa; y a la derecha, la rasa costera y el horizonte marino. En este pueblo nos esperará el autobús para llevarnos a Buelna, donde reanudaremos el recorrido costero.   
        En Buelna, tras recorrer sus calles en dirección a la costa, y una vez cruzada la línea de FEVE, encontraremos la senda de zahorra que nos dirigirá a Pendueles donde nos encontramos con la iglesia de San Acisclo, de portada gótica, y que nos sirve de referencia para comenzar, 100 m después, el nuevo y ancho trayecto costero que enlaza a su vez con la AS/GR19 procedente de Bustio.
        La senda continúa hasta la playa de Vidiago, zona con un área de descanso a la que se llegamos después de atravesar la pasarela sobre "Riega Novales". La "rasa asturiana" es el terreno que hace que este trayecto se desarrolle sin apenas desniveles, con vistas de hermosos acantilados. La senda serpentea por el interior, acercándose sin llegar a entrar en Vidiago. Pasamos por el cementerio de Vidiago y un kilómetro más adelante nos encontramos con uno de los efectos más maravillosos que ofrece la naturaleza en el litoral: los "bufones". Son surtidores de agua marina expulsada a presión a través de orificios creados en la roca por la acción kárstica de la caliza. En momentos de temporal es todo un espectáculo.
        Antes de llegar al siguiente pueblo atravesamos la sierra el Río Purón a 350 metros de su desembocadura, por "Los Puentucos" o "El Viveru". Dos kilómetros adelante entramos en Andrín por el barrio de Cabragío, donde destacan su construcción popular, la torre medieval (S.XI) y la playa.
        El tramo entre Andrín y Llanes se desarrolla ladeando la sierra litoral de La Cuesta, que tiene como cotas un campo de golf y el mirador de la Boriza. Este mirador da vista a las playas de Ballota y Andrín, y a gran parte de la rasa costera en la que se encuentra Llanes, capital del concejo. Al sur avistamos la Sierra del Cuera (1.315 m.) que en su punto más alto tiene El Pico Turbina, separador a modo de muralla natural del litoral y los Picos de Europa.
        Desde aquí cabe la alternativa de acceder a Llanes por carretera LLN-2, pasando por el pueblo de Cue. La senda, no obstante, continúa por la ladera de la rasa hasta pasar al lado de la capilla de El Cristo, para entrar finalmente en Llanes por La Portilla. Desde aquí alcanzamos la carretera LLN-2, que nos lleva a la playa de Toró.
        Aquí comienza la "senda de Toró" que continúa hasta la playa de Puerto Chico para enlazar con el Paseo de San Antón, bordeando el puerto pesquero. Si proseguimos hacia la Playa del Sablón, concluiremos nuestra ruta en el fenomenal Paseo de San Pedro.
              (Si lo deseamos, podemos bañarnos en cualquiera de las playas por las que pasamos, por lo que se recomienda llevar traje de baño y todos los útiles necesarios para un día playero.)