A la entrada del Cervera de
Pisuerga, por la P-627, detrás de la Cruz Roja, sale una senda
al lado del arroyo Rivera que enseguida gira a la izquierda subiendo
al lado de un tendido eléctrico donde cogemos una pista que seguimos
a la izquierda y luego a la derecha, dejando la que va a la
carretera, para subir por el robledal en 650 m a un pastizal
cercado. Aquí baja a la derecha una ancha senda que tomaremos,
abandonando la que traíamos que marcha a una explotación ganadera.
Tenemos ya frente a nosotros el Pico Almonga y nos detendremos para
hacer un recorrido visual del trayecto que hemos de seguir.
Bajamos unos doscientos metros al lado de la
cerca, y tras pasar una alambrada por donde podamos, empezaremos a
tomar contacto con la roca. Encaramos el ascenso hacia un claro que
vemos al SW, a 1200 m. de distancia, dentro de la verde mancha
boscosa a mitad de ladera. No hay senda ni hitos. Subimos
zigzagueando hasta el claro, rodeado de bosque mixto.
De esta
calva rocosa
giramos un poco a la izquierda y vamos en diagonal, ascendiendo y
recorriéndole entero hasta que tras 280 m. se acaba y una senda nos
lleva 150m. por el arbolado a la cresta, donde giraremos a la
derecha, al norte, encarando la cima por su cara Este, buscando el
suelo liso de canchales para llegar al Almonga (1519 m.),
pico emblemático de Cervera de Pisuerga.
Seguimos la cresta por senda en dirección SW pasando por
el pastizal del Collado del Brezal hacia el verdor del
Pico de las Cruces (1565 m, con vértice geodésico). Un
cómodo descenso nos lleva al Collado de los Novios, teniendo
a nuestra izquierda el Valle de Tosande y la famosa Tejeda.
A
la derecha de la cueva que tenemos en frente, con una trepada,
seguimos subiendo a la cumbre del mismo nombre
hasta llegar a una collada
(1365 m) que nos deja en frente de la siguiente cota (1462 m) que
hay que atacar a derecho, ya que en las laderas izquierda o
derecha hay mucha vegetación. Los 300 m de distancia y 100 m de
desnivel lo haremos con una fácil trepada, pero con cuidado.
Bajamos a la siguiente collada y dejamos la próxima cota
a nuestra derecha para llegar a la bonita pradera 200 m. antes del
Pico de Hoyovejas que no nos crea ninguna dificultad de
subida y seguir al Pico de la Celada (1593 m) que poco más
allá de la cumbre tiene un gran mojón (Es el pico más alto de
este cordal, un enclave fabuloso para los amantes de las buenas
vistas.).
Bajamos por la loma al Collado de los Barros para
por la cara norte de los Pilones llegar al collado, Majada de la
Corva, y pista que viene de Ventanilla. Aquí nos asomaremos
al N para ver la panorámica del Valle Estrecho, con Ventanilla, y la
cola del pantano de Ruesga.
Después ascenderemos a un alto en un buen repecho,
donde dejaremos la pista que se acaba poco más allá y seguiremos de
frente en dirección SW a Peña Redonda, que ya estamos viendo con su
cruz aérea, hasta el Collado Burrián que baja al Sur al Valle
Tosande por la Majada de las Hoyas y Hoyo Serna; y al Norte al
camino de San Martín de los Herreros.
Desde aquí encararemos de frente, y no por la ladera, el
Alto de Burrián (1746 m.) para llegar ya más cómodos al
collado de la Salida de Burrián (1697 m)
(Que nos encamina
a la derecha a las praderas de la falda de Peña Redonda (1996 m),
la que nos
invita a subir
por cualquier sitio).
Continuamos la marcha por la pradera en la ladera del Pico
Burrián o Peña del Medio hasta llegar a otra collada y empezar a
encarar el cordal al SE. Encontramos dos altos antes de llegar al
Pico Silla Pequeña (1757 m.) y Silla Grande (1758 m).
Nos dirigimos al collado entre el Pico del Campillo y el Pico de los
Collazos para por la ladera Este del último, alcanzar Peña
Oracada (1821 m).
Es la hora de
pararse a disfrutar de las panorámicas de la montaña palentina y de
los innumerables pueblecitos diseminados por la Peña, la Valdavia y
la Ojeda. ¿Cuántos puedes identificar?
De aquí seguimos la cresta a las dos lomas que vemos
después, disfrutando de la fabulosa panorámica para bajar al
Collado de la Braña y ascender definitivamente a Peña
Cantoral (1796 m).
El descenso de esta peña es algo más técnico y lento si lo hacemos
por la cuerda, pero interesante. Buscaremos canalillas por el
pedregal con cuidado de no lanzar cantos a los que vayan delante
nuestro, para llegar al verde pastizal de la collada que tenemos de
frente, que cruzamos para irnos hasta la punta de la cuerda, ya más
llano, donde tenemos un buen mirador natural.
Volvemos a desandar doscientos metros por la ladera norte de la peña
y salvando el roquedo de la derecha llegamos a la pradera que baja
en dirección al Cdo. de los Novios (Del cordal del Almonga), al otro
lado del Valle de Tosande. El descenso es cómodo, y al final, cuando
ya tenemos un poco más de ‘cisco’, antes de que el prado acabe en
los árboles, una senda poco definida nos mete al hayedo en dirección
Este pasando por los primeros y extraordinarios tejos, que nos
sirven de referencia para continuar en la misma dirección tendiendo
un poco más hacia abajo para en escasos 100 m. llegar al Mirador
de Tosande (donde distinguimos allá, al NE, el pueblo de
Polentinos y la Sierra de Peña Labra, detrás del Collado de los
Novios. A la izquierda de este collado destaca la Peña de la Celada
delante del Curavacas. Y a nuestra derecha la llanura de la comarca
de la Ojeda).
En el mirador topamos con la ruta señalizada de la Tejeda de Tosande. A la derecha nos baja por una larga y cuidada
senda que en casi 1 km. después de meterse al hayedo, serpenteando
por él, nos lleva en una fuerte bajada al puente que da a la pista
de subida al valle. Nosotros, para completar la excursión, nos
vamos por la senda de la izquierda que nos mete en el hayedo y en
200 m. llegamos a una plataforma de madera que rodea la
tejeda
más grande de este bosque de tejos. Una vez admirado este
extraordinario paisaje de tejos milenarios seguimos la estrecha
senda fabricada con maderos de contención entre los resbaleros de
las hayas para girar luego a la derecha por la valleja. Bajamos 500
m. pindios por la ancha senda adaptada por El Parque con
banquetas, escalones rompe-piernas, y que nos saca del bosque
al valle frente a un pilón, debajo del Cdo. de los Novios.
Seguimos la pista a la derecha pasando entre los
roquedos del Portillo de la Peña de los Novios y por un
corto barranco que después de la pista que sale a la derecha,
Camino de Tosande, nos mete a una escombrera para continuar
hasta el viaducto de la Robla. Pasamos por debajo de él y subimos al
aparcamiento, mirador y arboreto (jardín botánico), aunque
también podíamos haber tomado los dos cruces que han ido saliendo a
la derecha y que llevan más tendido por el Camino de Tosande
al aparcamiento del alto entre Cervera y Cantoral
(Comarcal 626, km. 2). |