El Alto de la Varga (1432 m) está situado entre La Lastra
y Santibáñez de Resoba en la carretera conocida como la Ruta de
los Pantanos. Configura la división hidrográfica de las cuencas
del río Carrión y Pisuerga. Desde este punto y mirando hacia el
Oeste, se divisa el pantano de Camporredondo, que recoge las
aguas del río Carrión. Hacia el Este, las aguas que vierten al
río Pisuerga, que remansarán en el pantano de Ruesga primero y
en el de Aguilar después. Al Norte nos encontramos con la falda
de la Peña Santa Lucía (1853m), sin llegar a ver la
cumbre, debido a un contrafuerte rocoso, en el que predomina el
Loraco o Ojo de la Lastra. Enclavada dentro del Parque
Natural de
la Montaña Palentina, la zona que
vamos a recorrer es considerada un área de vital importancia
para el Oso Pardo.
Partimos del mirador por el Camino de Valdeprovin
en dirección sur, bordeando un pinar y dejando tras
nosotros una buena estampa de Triollo, debajo de todo el cordal
de Fuentes Carrionas, presididos por el Curavacas y Espigüete.
Tras un fuerte repecho, rodeando el Alto del Monte
y Peña Copete,
llegamos a una collada. (A nuestra izquierda Rebanal de las
Llantas y San Martín de los Herreros donde funcionaron a la vez
que en Barruelo de Santullán las primeras explotaciones mineras
allá por los años 1843-1860).
Vamos ascendiendo siempre en dirección sur hasta
la falda de Peña Miranda. Una vez llegado a la base del peñasco
subo a la derecha, rodeando las paredes roqueras. El ascenso es
fácil, en diagonal, para girar nada más podamos a la
izquierda,
llegando a la cumbre norte después de una hora aproximadamente
desde que empezamos a andar.
Después continuamos cómodamente por la rocosa cresta
hacia la siguiente cota, cumbre central, que tenemos delante
nuestro.
Seguimos fácil el cresterío y llegamos a una llanada,
Majada Vieja y Ato de las Grajeras, la última y
más elevada cota de la pequeña sierra.
Buenas vistas hacia Castros Negros, Cueto Villaverde, Peñas de
Santibáñez, Cueto Palomo. Detrás de éste asoma el Piscurute y El
Fraile. A la derecha, detrás de la Sierra de Canales aparece
Peña Mayor, cómo no. Al fondo tenemos pueblos de
La Peña en el
horizonte de la llanura palentina.
Me arrimo al
borde, hacia el Norte en dirección al Espigüete.
Estamos encima del Valle de Miranda y ahora las panorámicas
de Fuentes Carrionas son muy agradecidas, desde el Collado
de
Miranda-Cueto Palomo hacia el Curavacas. Entre Arbillos y
Espigüete podemos identificar los montes de Riaño (Yordas,
etc.) y Mampodre.
Ahora puedo bajar por la vaguada al arroyo de Valdeagujas
hacia La Lastra y coger el GR1 que me devuelve al Alto de la
Varga. En esta ocasión regreso al otro borde, hacia Castros
Negros y bajo campo a través a la pista que dejé antes de
subir a la sierra y que va al Collado Miranda-Brezo.
Vamos un poco a la derecha hasta la Majada Valdeloso,
que está a cobijo de rocosas paredes, con corral para el
ganado y mirador extraordinario. Aquí tenemos de nuevo al
Espigüete, que no deja de contemplarnos.
Recorremos la pradera y roquedos con agujas de caprichosas
formaciones. Observamos el misterioso valle Miranda y
volvemos a la pista para subir a la izquierda al Collado
de Los Llanillos (entre el Alto de los Llanos y el Alto
de las Grajeras y límite municipal de Triollo y Rebanal),
donde también es fácil atacar la sierra que acabamos de
hacer y al SE cogeríamos el cordal de Peña Miranda a Peña
Redonda.
En este collado sale a nuestra derecha el Camino
del Pozuco, que lleva a Rebanal de las Llantas, bonito paseo
pero que luego nos obliga a hacer una fuerte subida del
pueblo a Alto de la Varga, siguiendo el GR1.
Hoy
continuamos bajando la pista a la izquierda, encontrándonos otro
desvío a la derecha que une con la anterior. Seguimos la que
traemos con fabulosas vistas (podemos ver los pantanos de
Camporredondo, Ruesga, Requejada y de Aguilar y la Sierra de
Peña Labra y abajo nuestro el valle de la Cueva Teresa)
para llegar por donde empezamos a subir a Peña Miranda y de ahí
por donde venimos al Alto de la Varga, donde comenzamos la ruta.
